Los ríos más azules están en la Huasteca
La Huasteca es un destino atractivo por sus ríos de color turquesa que invitan a refrescarse, navegar en ellos o apreciar las formaciones rocosas, cuevas o troncos que hay debajo del agua.
Algunos ríos se encuentran dentro de cañones de roca, otros rodeados de frondosa vegetación, pero siempre son un deleite para los sentidos.
Aunque, ¿cuál es la razón del característico color turquesa?
El color turquesa de los ríos de la Huasteca se debe a la gran cantidad de minerales que hay en ellos, en su mayoría azufre, que al asentarse producen el característico color turquesa.
Uno de los principales ríos es el Gallinas, formado por los ríos Ojo Frío y San Nicolás, y cuyas aguas terminan en la cascada de Tamul y que caen sobre el cauce del río Santa María, formando así el río Tampaón, un afluente de exquisito color turquesa.
Precisamente por su belleza, el río Tampaón está considerado como uno de los 10 ríos más increíbles de Norteamérica.
El sistema Santa María-Tampaón nace en los límites de San Luis Potosí y Guanajuato y pasa por Querétaro, donde se une con el río Ayutla para crear un espectáculo único: dos ríos unidos pero no mezclados, uno de agua caliente y otro de agua fría.
El Tampaón resulta idóneo para realizar rafting justamente dentro del quinto cañón del sistema Santa María. Recorre 15 kilómetros de aguas tranquilas combinadas con rápidos de clases II y III.
O bien, recorrerlo río arriba a bordo de una “panga” (canoa de madera) y disfruta el espectacular cañón, pasando por la Cueva del Agua hasta llegar al mirador en el centro del río y admirar la majestuosa cascada de Tamul.
Otro río de inolvidable color es Micos, que aunque no es turquesa, en él también se puede practicar rafting y salto de cascadas.
La temporada favorita para admirar el color turquesa de los ríos de la Huasteca inicia en noviembre y termina en enero.
Recuerda que si deseas sumergirte en sus aguas o realizar actividades de aventura, uses chaleco salvavidas y sigas las instrucciones de los guías en todo momento.
El hotel Tantalá es el punto idóneo para se encuentra en el punto de intersección de los caminos huastecos, por lo que es el punto de partida perfecto para descubrir los secretos de la Huasteca fuera del turismo convencional.
